Pedro Fresco, presenta su nuevo libro: «Energy Fakes, mitos y bulos sobre la transición energética»

Pedro Fresco, principal divulgador de energía en España y director de la Asociación Valenciana del Sector de la Energía (AVAESEN), publica su nuevo libro. El científico y divulgador valenciano publica «Energy Fakes, mitos y bulos sobre la transición energética», donde desmonta un gran número de mentiras asociadas a las energías renovables.

Pedro Fresco

Director General de AVAESEN

 

  1. ¿Qué te motivó a escribir «Energy Fakes» y abordar el tema de las falsedades en el ámbito de la energía?
    Durante los últimos años me he visto rebatiendo bulos de forma continua, bien en RRSS, en conferencias, en entrevistas, etc. Los bulos son muy persistentes y, aunque se rebatan, vuelven a aparecer cada cierto tiempo. Como combatir bulos individualmente es muy complicado, pensé que si se hacía un análisis integral, rebatiendo los principales bulos y mitos que escuchamos, el efecto sería mucho más potente ya que se vería claramente el modus operandi y las lógicas falaces que hay detrás de estos bulos, que en gran parte son compartidas. De ahí nace Energy Fakes. 
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  1.  «Energy Fakes» se presenta como una herramienta contra la desinformación y las fake news en el ámbito energético. ¿Cómo crees que la información incorrecta ha afectado las decisiones políticas y la toma de medidas cruciales en este sector?
    Por supuesto. Los dirigentes políticos son permeables a la opinión pública, y si la opinión pública está mal informada y es víctima de engaños y bulos, al final los responsables públicos se ven tentados a aceptar este tipo de mitologías. Se ve muy claramente en el ámbito local y regional, donde hay tendencias paralizantes y boicoteadoras porque grupos organizados o importantes actores económicos locales siembran la desconfianza y el miedo entre sus vecinos, afectando a los concejales, alcaldes o incluso consejeros. Es algo contra lo que tenemos que luchar ofreciendo una información veraz y siendo transparentes. 

 

  1.  Dentro de «Energy Fakes», ¿hay algún mito o falsedad que haya resultado particularmente sorprendente o difícil de desmentir durante tu investigación?
    Difícil de desmentir hay pocas, porque al final los bulos son verosímiles, pero carecen de datos que los sustenten. Sin embargo, hay grupos que por mucho que les desmientas los bulos con datos son impermeables a los hechos. Hay un caso muy claro de esto que son los colapsistas, aquellos que creen que la civilización se dirige a un colapso debido a las inminentes carencias energéticas y que siempre dicen que nada es posible, ni la instalación masiva de renovables, ni los coches eléctricos ni nada.

    El colapsismo se refugia en una falacia ridícula que retuerce la ciencia hasta negarla, que es que no se puede demostrar que lo que ellos dicen no va a pasar. Claro, no hay datos sobre el futuro porque el futuro todavía no existe, y consecuentemente no hay pruebas de lo que no puedo ver todavía. Pero esto es retorcer la ciencia hasta convertirla en religión. En ciencia son las predicciones las que se demuestran, son las evidencias las que validan las hipótesis y no al revés. Con esta falacia tienen engañada a muchísima gente y lo peor es que muchos de los que razonan así son científicos. 

 

  1.  ¿Cuáles son los mitos que destacarías entorno a la energía eólica?
    Hay varios, algunos comunes con la fotovoltaica y otros de carácter más individual. Compartidos con la fotovoltaica está todo aquello de que no hay materiales para extenderlas de forma relevante, que su presencia ahuyenta al turismo o que son muy intensivas en materiales (cuando la realidad es que el consumo de combustibles fósiles que ahorra evita mucho más consumo material del necesario para instalarlas). De forma más específica, destacaría el bulo de que se quema monte para instalar eólica (absolutamente falso) o aquel sobre las muertes de aves. La eólica mata aves, por supuesto, pero muchísimo menos que otras infraestructuras humanas como los edificios, las carreteras o las propias líneas eléctricas, o realidades también derivadas de la presencia humana como los envenenamientos o los propios gatos domésticos.

    Lo curioso de estos mitos es que son los mismos en todo el mundo, da igual que sea España, EEUU o Australia. Y eso no es porque sean reales, al revés, es porque los grupos opuestos a la eólica se los copian los unos de otros y esto se pilla fácil cuando ves argumentarios que por cuestiones de entorno natural o regulatorias son inaplicables al entorno español.

 



  • Fecha de la noticia: 2023-10-24
  • Fuente: Apecyl
  • Ambito: 'Nacional'
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