El Gobierno Vasco desestima el parque eólico de Ordunte, limítrofe con Cantabria

Para los rectores del Ayuntamiento de Carranza, «la desestimación es definitiva»; esto es, que no ha lugar a retomar el parque en el futuro. Un aspecto, el de la desestimación definitiva o no, sobre el que sin embargo no se ha pronunciado explícitamente el Ejecutivo de la comunidad vecina. Ni afirma, ni desmiente, ni confirma.


Y es que fueron muchos los argumentos ‘a favor’ del parque de Ordunte que se barajaron en 2002 a la hora de redactar el Plan Territorial Sectorial de la Energía Eólica de la comunidad vasca. En este sentido, el documento pondera su escasa incidencia sobre la fauna -«los accidentes de colisión de aves contra aerogeneradores no son frecuentes. La mortalidad es de pequeña entidad, y en todo caso notablemente inferior a la producida por las carreteras y autopistas», se dice-; su reducido impacto geológico -«el valor geológico de un emplazamiento no queda disminuido sensiblemente por la existencia de una instalación»-; su rol dinamizador -«tienen un alto grado de aceptación por parte de la población, constituyendo un atractivo más para la zona»- o, por citar otro argumento, el hecho de que no se altere desmesuradamente el paisaje: «la valoración del paisaje depende de la interpretación subjetiva del espectador», se expone en el documento.