Los mayores proyectos eólicos de León están en Omaña y la Cepeda

    Con condiciones porque los alcaldes no quieren tampoco que las empresas campen a sus anchas, como ya está ocurriendo. El Ayuntamiento de Valdesamario se ha visto obligado a incoar un expediente contra laempresa que promueve el parque eólico San Feliz, en Murias de Ponjos, por abrir un camino sinautorización para acceder a la zona donde previsiblemente se instalarán las palas eólicas.

    Los grupos ecologistas han aplaudido la decisión municipal por entender que el Ayuntamiento defiende sus tesis, aunque no sea así. Según la Sociedad Española de Ornitología y Gedemol, un grupo de defensa de la Montaña Oriental leonesa, esas obras afectan a una colonia de urogallos. En cambio, el alcalde de Valdesamario dice que él nunca ha visto un urogallo en la zona. “Yo lo que quiero es que las cosas se hagan bien y no vengan pasando por encima de todo”, puntualiza José Díez Pérez.

    Cipriano Elías Martínez, vicepresidente segundo de la Diputación y alcalde de Riello, municipio que comparte otro proyecto de parque eólico con terrenos de Valdesamario, tampoco se opone, pero deja claro que “no se puede hacer cualquier cosa”. “No se pueden hacer pistas de 10 metros de ancho destrozando caminos. Los parques eólicos deben integrarse y respetar todo: los urogallos, si los hay…, todo”.

    En estos momentos, los grupos ecologistas libran en esta zona de León una de sus grandes batallas judiciales que tienen lugar en España contra la instalación de parques eólicos. De hecho, la sentencia que anulaba la autorización para el parque eólico Murias II, que se extiende por los municipios de Murias de Paredes y Riello y que plantea la instalación de 44 aerogeneradores, se consideró histórica. El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Leónparalizó el pasado mes de abrilese primer parque eólico de los 17 previstos en la comarca de Omaña .El fallo del magistrado reconoció que no se pueden fragmentar los proyectos, como se había hecho, a la hora de tramitar la licencia de impacto ambiental. El fallo dejó sin efecto la autorización de la Junta por no seguir el procedimiento “ordinario” y emplear el “simplificado”, que ofrece menores garantías formales y materiales.

    La demanda había sido interpuesta por la Sociedad Española de Ornitología (SEO-Birdlife) y a la asociación URZ. Según los ecologistas,la resolución del magistrado ofrece además otro argumento jurídico prácticamente inédito, ya que reconoce la necesidad de no fragmentar los proyectos para pasar el filtro ambiental preceptivo, una actuación muy extendida entre las eléctricas españolas para acceder a ciertas subvenciones públicas, a las que no tienen derecho los parques que producen más de 50 megavatios de energía.

    Omaña es una zona protegida por varias figuras jurídicas comoLugar de Importancia Comunitaria (LIC), Zona de Especial Protección para las Aves (Zepa) o las conocidas como IBA (áreas importantes para las aves), por cuya pertenencia se aplica la protección de la Red Natura 2000 y la Directiva Hábitats.

    ¿Qué beneficios da un parque eólico? Según algunas fuentes, las empresas eólicas están ofreciendo entre 2.500 y 3.000 euros anuales por cada molino que se instale en la zona. Para muchas juntas vecinales, que son dueñas de cientos de hectáreas de montes, es mucho dinero. Ahora, el único ingreso que generan los pueblos es por el alquiler de cotos de caza, cantidades que en general no pasan de los 6.000 euros en el mejor de los casos. Algunas juntas vecinales podrían pasar a gestionar más de 45.000 euros, aunque surge otro interrogante. ¿Cómo se va a gastar el dinero? En pueblos como Andarraso, que tiene unproyecto de parque eólico, son 20 vecinos y la media de edad supera los 70. La batalla sólo ha hecho que empezar. Omaña ya no teme el agua de un pantano, como hace dos décadas. Ahora el futuro se escribe en el aire, aunque no genere puestos de trabajo en la zona. Pero ésa ya es otra pregunta.



  • Fecha de la noticia: 2008-11-16
  • Fuente: Apecyl
  • Ambito: Local
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