Las empresas familiares no aprueban la reforma energética

Parece que la reforma energética no está gustando a casi nadie. Si las principales eléctricas ya se habían posicionado contrarias a esta reforma, las renovables y la eólica en particular se han hartado de denunciar públicamente los efectos devastadores que esta reforma acarreará para todo el sector: tanto en cifras económicas, como en pérdida de empleos.
Pues bien, esta vez los que han alzado la voz denunciando la negatividad de las nuevas medidas que afectan al sector eléctrico han sido los empresarios familiares. Una encuesta rápida realizada a los asistentes al XVI Congreso de la Empresa Familiar, muestra cómo la reforma recibe una puntuación de 1,35 sobre 9, lo que denota que, de una manera u otra, la nueva legislación incide en su actividad de forma negativa y sirve para lanzar un mensaje claro al Gobierno. Los empresarios también vapulean la reforma (o la falta de reforma) de las Administraciones Públicas (1,75). Sin embargo, la unidad de mercado ha recibido un apoyo claro, un 6,13.