El Principado presiona a Medio Ambiente para que desbloquee la línea Sama-Velilla

La patronal FADE y los sindicatos UGT y CC OO advirtieron que un posible apagón eléctrico sería «terrorífico» para la industria asturiana. «Que paren los hornos altos de Arcelor sería un desastre para la región», advirtió la patronal. Arcelor, Alcoa y Asturiana de Zinc son los tres mayores consumidores industriales de electricidad del país y forman parte del corazón económico del Principado.
El secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA) y candidato del PSOE al Principado, Javier Fernández, también salió en defensa del trazado. «Con todo el respeto al medio ambiente y a todos los estudios y análisis de impacto ambiental, para nosotros es una línea (Sama-Velilla) que debe de hacerse en el menor tiempo posible», argumentó. Todo lo contrario de lo que defienden los socialistas leoneses, que públicamente han mostrado su rechazo a la iniciativa eléctrica alegando su elevado impacto. El PSOE de León, al que pertenece el presidente Zapatero, ha ejercido presiones sobre el Gobierno para frenar el proyecto.
El mismo argumento, el del impacto sobre el medio ambiente, utilizaron PP e IU en Asturias cuando en noviembre de 2009 unieron fuerzas en la Junta para tratar de frenar el proyecto de Sama-Velilla. Votaron a favor de incluir en el parque natural de Las Ubiñas varios montes del concejo de Aller por donde está previsto que discurra el tendido eléctrico.
La vicesecretaria de política territorial del PP, María Teresa Mallada, aseguró que «no se puede obligar a hacer pasar una línea por un lugar sin antes haber llevado a cabo un estudio medioambiental claro sobre el trazado». Y señaló que de cruzar algún lugar la línea debería de pasar por los terrenos que estuvieran más degradados. También puso en duda la necesidad del trazado. «No sabemos si es lo más adecuado porque los socialistas no tienen un plan energético definido, no sabemos si la región quiere seguir siendo exportadora o cambiar de estrategia», defendió.
IU se desmarcó de la FSA, su socio en el Gobierno asturiano, y acusó a Red Eléctrica Española (REE) de «alarmar y atemorizar a la población» por haber alertado del riesgo de apagón debido a la avería que se produjo en Pajares. «Cómo se puede producir un apagón general con cinco centrales térmicas de un tamaño importante, con centrales de biomasa, de cogeneración con gas, embalses y molinos eólicos, en una región que no sólo tiene potencia para autoabastecerse, sino para exportar a media España», señaló la coalición.
La plataforma vecinal en contra de la construcción de Sama-Velilla también cargó contra REE, a la que acusó de «amenazar constantemente con un apagón que es imposible que llegue». La portavoz de la agrupación, Marisol Rodríguez Bigotes, aseguró que «decir que la línea es imprescindible es una falacia».