Apecyl fija el reto de incrementar la potencia instalada en Castilla y León de 6.000 a 10.000 megavatios hasta 2030

La Comunidad cuenta con 25 centros industriales vinculados al sector eólico en seis provincias, donde generan 6.000 empleos directos y entre un 10% y un 15% más de indirectos, según los datos recogidos en la Agenda Sectorial de la Industria Eólica, public

Castilla y León, Comunidad líder en potencia eólica en funcionamiento, cuenta ya con 5.595 megavatios de energía eólica generados en  los 244 parques.

La Asociación de Promotores de Energía Eólica de Castilla y León se ha marcado el reto de incrementar la potencia instalada hasta 10.000 megavatios en 2030. Muchas de las instalaciones eólicas asentadas en la Región, dan vida a la ‘España Vaciada’, que en la Comunidad representa uno de sus máximos exponentes.

Muchos de los puestos de trabajo los protagonizan empleados que se han quedado a vivir “en pueblos de diez habitantes, pero también en cabeceras de comarca si la distancia no es mucha”. “En algún caso tenemos compañeros que gracias a su familia se mantiene abierto el colegio”, asegura el presidente de Apecyl, Javier Gracia. “Hay que potenciar eso. La instalación está donde está y es muy difícil de deslocalizar”.

El sector, a pesar del cierre traumático de centros importantes como el que Vestas poseía en Villadangos del Páramo, puede presumir de tener una buena base de este tipo de infraestructuras. De hecho, la propia firma danesa dispone de otras seis instalaciones en el territorio regional.

Los 25 centros industriales vinculados al sector eólico que recoge el informe de la AEE, corresponden a multinacionales, pero también a pequeñas empresas del sector, de carácter local y provincial, que han crecido al albur de un ámbito económico de futuro y con mimbres para crecer, con una media de entre 20 y 30 empleados por pymes. En este sentido, también surgen compañías para cubrir necesidades como, por ejemplo, los cambios de aceite de las multiplicadoras. “Son empresas que se han adecuado a este entorno. Han pasado de ser una subcontrata estándar a ser muy especializada”, destaca Javier Gracia. “El que tiene máquinas excavadores todos los años factura 200.000 euros con los parques que tiene alrededor. Es gente preparada y con presencia cercana”, asegura. La práctica totalidad de la cadena posible de valor que rodea un parque eólico es local, desde la fabricación al canon de ocupación que percibe el Ayuntamiento y el gasto del personal de mantenimiento en la zona. Todo, salvo reparaciones muy concretas de fibra óptica u otras labores específicas.

Una de las principales preocupaciones del sector reside en la antigüedad de los parques, algo sobre lo que también advierte el informe de AEE. Así, en 2020 casi la mitad de los aerogeneradores españoles, que se traducen en 10.000 megavatios, tendrá más de 15 años. De ellos, 17 se encuentran en Castilla y León, de los 245 que en el conjunto del país se enfrentan a este escenario. Por su condición de pionero en energía eólica, España es el primer país que se va a enfrentar al proceso de finalización de la vida útil de sus parques eólicos, junto a Dinamarca y Alemania.